REPERCUSIÓN DE LAS ENFERMEDADES PULMONARES SOBRE EL CORAZÓN

Existen muchas enfermedades propias del corazón:alteraciones de las válvulas, del músculo cardiaco (miocardio), de la membrana que envuelve al corazón (pericardio), etc.;pero, también puede presentarse compromiso cardiaco cuando algún otro órgano padece de un transtorno específico. Un ejemplo muy importante de este último concepto son las enfermedades del aparato respiratorio que pueden ser muy variadas: bronquitis crónica, asma bronquial, fibrosis pulmonar, enfisema pulmonar,etc.
El común denominador para que estas enfermedades comprometan al corazón es la presencia del aumento de presión en las arterias pulmonares, conocido como hipertensión pulmonar.
El corazón del lado derecho , específicamente el ventrículo derecho, bombea la sangre, procedente de todo el cuerpo, hacia los pulmones. Pero, si este flujo sanguíneo encuentra una resistencia a su paso por los pulmones (hipertensión pulmonar)la va a transmitir hacia atrás, de tal manera que va a repercutir sobre el corazón derecho, haciendo que las paredes de éste se vuelvan màs gruesa(hipertrofia)para tratar de vencer este aumento de presión al que está siendo sometido. Después de algún tiempo, este ventrículo derecho ya no va a poder cumplir con su función de bombeo adecuadamente y la sangre va a empezar a tener un flujo retrógrado hacia la aurícula derecha (insuficiencia tricuspídea), llegando al hígado, dilatándolo, y hacia los miembros inferiores, aumentándolos de volumen (edema).
Es por todo esto que es importante tratar adecuada y precozmente las enfermedades pulmonares porque no solamente pueden comprometer el aparato respiratorio sino también al aparato cardiovascular, haciendo más complicado su tratamiento.