Este sindrome también es conocido como sindrome de corazón de fiesta, sindrome de corazón de fin de semana o sindrome de corazón de vacaciones. Recibe estos nombres porque se relaciona con todas aquellas circunstancias en las que existe alguna celebración de por medio.
Es un conjunto de síntomas y signos cardiacos producidos por el consumo masivo de alcohol que trae como consecuencia una intoxicación aguda que altera al corazón.
Se presenta en personas generalmente con buena salud que están celebrando en una fiesta, bebiendo cantidades moderadas o altas de alcohol en corto tiempo. Los niveles de alcohol etílico o etanol en sangre van a depender de varios factores: grado de concentración de alcohol en la bebida, tiempo en que se ingiere el licor, peso corporal del bebedor, contenido de agua en el organismo, estado de ayunas, sexo y habituación.
La repercusión en el corazòn puede ser significativa, ya que el etanol afecta directamente al músculo cardiaco y, por consiguiente, su contracción, trayendo como consecuencia una disminución en la capacidad del corazón para bombear la sangre. Pero, la repercusión más importante del excesivo consumo agudo del alcohol es en el desencadenamiento de arritmias, especialmente la fibrilación auricular. Esta es una arritmia frecuente y peligrosa, ya que es un factor de riesgo importante para producir tromboembolismo cerebral que lleva a un accidente cerebrovascular isquémico, es decir, por falta de irrigación de alguna regíon de la masa encefálica.
En otras ocasiones, más severas, se pueden producir arritmias más graves, y hasta muerte súbita, dependiendo si el afectado tiene una enfermedad cardiaca de fondo.